Proyecto impulsado por la Fundación Pepe Iglesias, con el objetivo de ayudar al sector del transporte en materia social.
La idea de crear un residencia para mayores surge en el seno del Grupo Asebutra, después de que los responsables de la Fundación comprobaran la situación de desprotección en que quedaban muchos de los transportistas a la hora de su jubilación. Por este motivo, y aunque la residencia está abierta al público general, se ha querido especialmente mantener como prioridad la atención a este colectivo.
El edificio, situado en una parcela municipal junto al centro de salud José Luis Santamaría y la ribera del río Vena, tiene una superficie total construida de 3.100 metros cuadrados, repartidos en cuatro plantas, además del piso bajo y un semisótano. Tal y como apuntan los arquitectos del proyecto, la residencia es un edificio cuadrado, con un diseño sencillo, donde prima la comodidad. Cuenta con una buena orientación y mucha luz, lo que hace más agradable la estancia de los mayores.
Cuenta con:
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62 plazas en habitaciones amplias y cómodas (dobles e individuales)
Red wifi y últimas tecnologías
Teléfono en habitaciones
Grandes espacios exteriores y jardines
Alimentación elaborada en el centro
Espacios comunes: gimnasio y sala de fisioterapia, sala terapia ocupacional, salas multiusos, biblioteca, espacios atención sanitaria